
Este escrito viene de lo común y he ahí su potencia animal, su apiñamiento de telaraña internacional, su canto de TARANTÚLA. De nuestro agujero, de nuestro triangular símbolo viene esta mordida venenosa. Esperamos que sientan en su cuerpo la costra negra que aquí y ahora se expandirá entre nosotrxs. En esta época dónde nos ahogan y respirar se ha vuelto tan difícil como conspirar (Preciado). Somos animalia: halito vital de un nuevo momento revolucionario, que es, y siempre lo será, cualquier momento, que proyectil se proponga destruir el orden existente, sus nuevos ídolos y sus mercaderes. (Nietzsche)

